BEAGLE

Un poco de historia

Los orígenes del Beagle son muy antiguos. Se remontan a la antigua Grecia, donde encontramos rastros de perros similares al Beagle. Durante la conquista de Inglaterra, fueron importados a este país por las legiones romanas. En el siglo XI, Guillermo I introduce los Talbot, raza hoy en día extinguida, y se produce el mestizaje para dar lugar a dos razas intermedias: el north country beagle (beagle del norte) y el southern hound (sabueso del sur). Fue a partir de estas dos razas que el reverendo Phillip Honeywood crió una primera camada de Beagles en Essex en la década de 1830. Enseguida, algunos miembros de la familia real de Inglaterra se interesaron por los Beagles y empezaron a criarlos. El estándar todavía era bastante vago en ese momento, y había varias variedades de Beagles, bastante diferentes entre sí.

La raza llegó a los Estados Unidos en la década de 1840, luego a Francia en la década de 1860, pero fue especialmente en el siglo XX cuando la popularidad del Beagle estalló en todo el mundo. El estándar se fijó para convertirse en el que conocemos hoy en día, pero la raza casi desapareció después de la Primera Guerra Mundial, antes de ser salvada por los pelos. Durante los últimos treinta años, el Beagle se ha mantenido como una de las 10 razas más populares del mundo. No solo ha conquistado a los cazadores, sino también a las familias.

La Federación Cinológica Internacional reconoció definitivamente al Beagle en 1955.

Características físicas del Beagle

Las características físicas del Beagle están claramente definidas por la FCI:

Cuerpo: de tamaño pequeño a mediano, el Beagle tiene un cuerpo armonioso y musculoso. Corto en la zona renal, pero bien equilibrado. Su físico es poderoso para resistir sus carreras durante las partidas de caza.

Cabeza: la cabeza es de forma cuadrada, potente, con líneas bastante finas (sobre todo en la hembra). El hocico no es puntiagudo y el stop está bien definido.

Orejas: son colgantes, bastante largas y con la punta redondeada. Generalmente son de color marrón. Algunos ejemplares (poco comunes) tienen las orejas blancas.

Ojos: los ojos son pequeños y están delineados en negro. Son de color pardo oscuro o avellana.

Cola: es moderadamente larga y fuerte. Es llevada alegremente pero no enroscada sobre la espalda. Bien cubierta de pelo, tiene la punta blanca.

Pelaje: su pelo es corto y muy denso. Es muy resistente a las intemperies.

Color: por regla general, el Beagle tiene un manto tricolor: blanco, negro y fuego. También hay Beagles bicolor y Beagles totalmente blancos.

Carácter del Beagle

Es conocido por su gran dulzura e increíble amabilidad. El carácter del Beagle también hace de él un perro muy cariñoso. De hecho, esta es una de las razones que lo convierten en un excelente perro para familias con niños. Paciente, nunca agresivo, también es muy juguetón y le encanta hacer ejercicio. Como buen perro de caza, necesita correr para estar completamente equilibrado. Es sociable y dócil, siempre que, por supuesto, se haya socializado correctamente desde una edad temprana. ¡Ojo! El Beagle también es conocido por ser terco y glotón. Increíblemente leal, normalmente es obediente, pero puede tomar iniciativas propias si se le mete algo en la cabeza.

Comportamiento del Beagle

El Beagle no es un perro guardián. Por lo tanto, no se mostrará particularmente desconfiado con los extraños, a quienes incluso irá a saludar. Con otros perros tampoco tiene problemas, siempre que esté acostumbrado a su presencia desde cachorro. Como buen perro de manada, se lleva bien con otros perros. Con los demás animales, las cosas se complican un poco más. El Beagle es un perro de caza puro, con un fuerte instinto depredador. Por lo tanto, será necesario tomarse el tiempo necesario para acostumbrarlo a la presencia de otros animales desde pequeño, y tener mucha precaución cuando se encuentre con animales exóticos.

Compatibilidad del Beagle

El Beagle es un perro adecuado para todo tipo de familias, siempre que esté debidamente cuidado y se le proporcione toda la actividad física que necesita. A pesar de su pequeño tamaño, el Beagle tiene energía de sobra y no puede contentarse con un breve paseo diario para hacer sus necesidades. El dueño ideal del Beagle es alguien deportista, a quien le gusten las salidas por el bosque, el campo o la playa. Obviamente, es un perro perfecto para los cazadores. Hazle practicar deportes caninos para que estire las patas. No adoptes un Beagle si tienes que estar mucho tiempo fuera de casa.

Salud del Beagle

El Beagle goza de una buena salud. Robusto, hecho para el ejercicio, este perro infatigable tiene una esperanza de vida de entre 12 y 15 años. Sin embargo, la raza es propensa a ciertas enfermedades, sobre todo el hipotiroidismo. El Beagle también tiene tendencia a ganar peso fácilmente y a la obesidad, algo a lo que no ayuda nada su lado glotón (¡incluso puede robar comida!). Finalmente, sus orejas colgantes requieren una atención especial para evitar infecciones de oído y parásitos.

Entorno del Beagle

El Beagle se adapta muy bien a todas las situaciones, siempre que pueda hacer suficiente ejercicio. Por tanto, puede adaptarse a la vida en un piso, pero cuidado: a veces tiene tendencia a ladrar mucho, lo que podría causar problemas con el vecindario. Pero viva en la ciudad, en el campo, en un apartamento o en una casa, el Beagle no debe permanecer encerrado: tiene que correr, jugar y oler los olores del exterior para estar perfectamente equilibrado. 

Educación del Beagle

A pesar de su dulzura y bondad, educar a un Beagle no es siempre un camino de rosas. De hecho, detrás de su tierna mirada se esconde un carácter a veces fuerte. Es por eso que no debes retrasar su adiestramiento, sino ponerte manos a la obra tan pronto como tu cachorro llegue a casa. Su fuerte instinto de caza a veces lo lleva a escaparse y hace que se vuelva totalmente desobediente si ha olido una pista interesante. Por lo tanto, debes ser firme, pero sin violencia, para enseñarle a tu perro lo básico. No dudes en contratar a un adiestrador de perros si la tarea te parece demasiado difícil.

Alimentación: cómo alimentar al Beagle

La alimentación del Beagle es un factor importante para preservar su salud. De hecho, la comida de mala calidad tendrá un impacto directo en tu perro. Por tanto, es necesario elegir una comida adaptada y cualitativa. Al ser un perro con un importante gasto físico, su alimentación debe poder apoyarlo en sus esfuerzos. Elige una alimentación rica en proteínas animales (y no vegetales: tu perro no deja de ser un carnívoro). Es preferible no comprar pienso o paté del supermercado. Estos productos, elaborados con ingredientes de mala calidad, no tienen valor nutricional y no son adecuados para las necesidades dietéticas de tu perro. En su lugar, opta por pienso o paté de calidad, un poco más caros, o incluso por un servicio de comida para perros a medida. En todos los casos, respeta siempre la cantidad de comida recomendada para evitar cualquier riesgo de obesidad. Por supuesto, tendrás que ir adaptando esta cantidad con la edad de tu perro, ya que las necesidades cambian con el tiempo. Un cachorro Beagle comerá de manera muy diferente a un Beagle senior. 

Cuidados y aseo del Beagle

• Precio del Beagle: entre 500 y 1200 euros

• Vacunas: entre 50 y 80 euros al año

• Alimentación: a partir de 50 euros al mes para una alimentación de calidad

• Presupuesto mensual: entre 40 y 60 euros

Los cuidados del Beagle no te robarán demasiado tiempo ni dinero. Cepillar a este perrito es fácil y rápido: bastará con peinarlo una vez por semana fuera del período de muda (primavera y otoño); durante este período, tendrás que cepillarlo tres o cuatro veces por semana. Presta especial atención a sus oídos para evitar cualquier otitis o infección y límpialos periódicamente con un producto adecuado. No descuides el cuidado de uñas, ojos y dientes. Por último, tampoco olvides los cuidados preventivos y mantente al día con las vacunas y antiparasitarios, sobre todo si lo llevas de caza habitualmente.

Sueño del Beagle

Debido a su pelo denso y apretado, el Beagle puede dormir perfectamente al aire libre sin que tengas que temer por las inclemencias. Eso sí, siempre que las temperaturas no sean extremadamente frías. Puede dormir en una caseta para perros, pero elígela con cuidado, porque la comodidad de tu perro dependerá de su refugio para pasar la noche. Ten en cuenta un criterio fundamental: la caseta debe adaptarse perfectamente al tamaño de tu Beagle. También agradecerá dormir dentro de casa con sus dueños, pero una vez más, elige una cama adecuada para tu Beagle. Evita que duerma en tu habitación, ya que podrías incentivar el desarrollo de un apego demasiado fuerte que, a largo plazo, puede convertirse en ansiedad por separación.

Juegos y actividades físicas para el Beagle

Como buen perro de caza, dinámico, el Beagle necesita poder hacer ejercicio todos los días durante al menos una hora y media. De lo contrario podría aburrirse, deprimirse y sentirse mal. Dedica suficiente tiempo a jugar con tu perro para evitar este tipo de problemas. El Beagle, a veces cabezota, puede tener un poco más de dificultades para seguir órdenes en disciplinas como el agility, pero gracias a su agudo sentido del olfato sobresaldrá en otros deportes caninos, como el rastreo. En casa, ofrécele suficientes juguetes para mantenerlo ocupado cuando no estás. El Beagle es muy inteligente, así que estará encantado con juegos de inteligencia para devanarse los sesos.

Seguro: protege a tu Beagle

En la mayoría de Comunidades Autónomas, el Beagle no necesita ningún seguro especial. Está cubierto por el seguro de responsabilidad civil, generalmente incluido en el seguro del hogar y que cubre a todos los miembros del hogar, incluidas las mascotas. Este seguro permite hacer frente si tu perro, sin querer, causa daños materiales o corporales. Aunque puedes optar por un seguro más amplio, pero más caro: el seguro de responsabilidad civil privada. En cualquier caso, consulta las leyes de tu región sobre los seguros para perros.

La mutua para perros es una excelente manera de proteger a tu amigo de cuatro patas, pero también de poder hacer frente a gastos veterinarios imprevistos. Aunque la salud del Beagle es bastante buena, no es inmune a enfermedades y patologías graves. Si deseas contratar una mutua para perros, plantéatelo cuanto antes, ya que la mayoría de los seguros de este tipo rechazan a los perros que son demasiado viejos o que ya están enfermos. Antes de elegir tu mutua, lee bien el contrato para conocer las cláusulas de exclusión y los gastos reembolsados y excluidos. Cuanto mayor sea la contribución cada mes, mayor será el límite de reembolso.

Especificidades físicas del Beagle

El Beagle es un perro de tamaño mediano, caracterizado por su pelaje a menudo tricolor y su cola terminada en una punta blanca. Los machos y las hembras tienen aproximadamente el mismo tamaño y miden entre 33 y 41 cm a la cruz. En cuanto al peso, la diferencia también es mínima: de 13 a 18 kilos para el macho, frente a 12 a 17 kilos para la hembra. Como no hay diferencia entre sexos, tu elección tendrá que basarse principalmente en criterios personales.

El Beagle pertenece al grupo 6 de la FCI: perros tipo sabueso, perros de rastro y razas semejantes. Lleva el número 161.