PARA MI MASCOTA: ¿CARNE BLANCA O CARNE ROJA?

¿Qué es la carne, en realidad?

La carne es, ante todo, músculo. Y según la especie de la que provenga (vacuno, cordero, pato, caballo, atún; o pollo, pavo, conejo…), los músculos tendrán un color diferente: rojo para los primeros, rosa (blancos tras la cocción) para los segundos.

Carne roja, carne blanca... ¿Cuál es la diferencia?

A menudo creemos que el color influye en la cantidad de proteínas y aminoácidos que contiene el músculo. ¡Falso! Lo que hay que mirar es sobre todo el contenido en hierro. Es bien conocido que éste es dos veces más elevado en la carne roja y las vísceras. Tampoco hay que olvidar el contenido en grasas, que depende sobre todo de la especie de origen de la carne.

Si tenemos que resumir esquemáticamente: una carne blanca de pollo será más “magra” que una carne roja de buey. En los pescados, el color no siempre tiene relación. Hay que conocer bien la especie.

¿Cuál es más grasa?

👉 Aves

En los pájaros, la grasa se almacena bajo la piel o en el hígado, nunca o casi nunca en los músculos, que le permiten volar. Así, una pechuga de pollo o de pavo será siempre magra. El pato es un poco diferente, pues almacena más grasa.

👉 Mamíferos

En los bovinos y ovinos, la grasa se acumula en el músculo, pero en el cerdo lo hace bajo la piel. De forma general, los animales jóvenes (como los lechales o los terneros) serán más magros que los adultos.

👉 Pescados

Los pescados azules y grasos como el salmón almacenan las grasas dentro de sus músculos, ¡es bien sabido! El bacalao es famoso por su hígado muy rico… En el caso de los pescados, los blancos son los más magros. Con una excepción: el atún que, a pesar de su bonita carne roja, también es más bien magro (excepto en algunas partes, muy grasas, llamadas toro -ventresca- y muy apreciadas en Japón).

La mala reputación de la carne roja: ¿una exageración?

Cada vez desconfiamos más de la carne roja en favor de la blanca. Demasiado grasa, llena de toxinas... ¿Es realmente el caso?

Es cierto que una carne roja contiene más grasas saturadas. La carne blanca tiene la reputación de ser menos alergizante. Sin embargo, las alergias dependen mucho de los hábitos alimentarios: solo podemos ser alérgicos a alimentos que consumimos frecuentemente. Por eso en los animales domésticos, las alergias a la carne roja son más habituales.