EDUCACIÓN DEL WESTIE

El West Highland White Terrier no es precisamente el rey de la obediencia, pero tampoco es un perro particularmente difícil de educar. Solo hace falta armarse de paciencia y un poco de experiencia. Los Westie son perritos muy tiernos y afectuosos, pero también muy juguetones. Con algunos juegos y unas pocas chuches, ¡no te será tan difícil inculcar una buena educación al Westie!

Facilidad para educar al Westie

Si lo coges desde pequeñito, el Westie es un perro fácil de educar. En cambio, lo es relativamente menos si ha adquirido malos hábitos durante su juventud. En efecto, el carácter del Westie es bastante tozudo, por eso es bastante difícil reeducarlo. Por todo ello, el Westie requiere una educación firme y coherente lo antes posible.

La educación del Westie es esencial para instaurar las reglas básicas en casa, como por ejemplo la limpieza; pero también para socializarlo con los humanos y con otros animales y para garantizar la seguridad de tu perrito, así como de las demás personas durante vuestros paseos. También te hará falta para practicar una actividad canina con él. Tu Westie es un perrito lleno de energía que necesita ejercitarse todos los días si es posible. Gracias a una actividad canina deportiva, harás de él un perro realizado y con una excelente salud.

Obediencia del Westie

Para que te obedezca un West Highland White Terrier tienes que pasar mucho tiempo con él para reforzar vuestra complicidad. Si tu perro confía en ti, será menos cabezota. No olvidemos que el Westie es un perro muy cercano a los miembros de su grupo social. Adora satisfacer a sus amos y también le encanta que se ocupen de él. Si has conseguido crear una relación de confianza, ¡podrás incluso empezar a considerar enseñarle algunos trucos a tu Westie! En realidad es todo un payaso, al que le chifla divertir al público.

Por otra parte, algunos Westie tienen tendencia a ser huidizos y a ladrar. Entonces será necesario inculcarles una educación canina de calidad para pulir esos rasgos de carácter molestos que a veces pueden llegar a ser incluso peligrosos.

La educación de un Westie

Para realizar adecuadamente la educación del Westie, ¡el refuerzo positivo es la mejor solución! Gracias a recompensas de todos tipos (chuches para perros, juegos y felicitaciones orales) fomentas el buen comportamiento de tu perro. Dentro de la educación positiva, simplemente intentamos ignorar los malos comportamientos. No sirve de nada usar la violencia para hacerte escuchar o respetar. Es más productivo y evidentemente menos cruel concentrarte en lo que tu perro hace bien, más que centrarte en lo que hace mal.

Si te mantienes coherente y constante en tus ejercicios de educación del Westie, los resultados podrían ser bastante rápidos. Empieza por pequeños ejercicios simples en casa y cambia progresivamente de contexto. Es necesario que tu perro obedezca bajo todas las circunstancias, por eso es tan importante que comiences la educación fuera de casa lo antes posible. Cuidado: no cambies de técnica por el camino; tu perro podría darse cuenta y mostrarse menos cooperativo.

Si ya tienes otros perros bien educados en casa, no dudes en aprovecharlos para perfeccionar la educación del Westie. Aprender con el ejemplo es muy efectivo. Además, tu compañero de cuatro patas, que adora complacerte, puede ponerse celoso si felicitas a otro perro y a él no. Entonces tratará de comprender cómo recibir él también estas caricias. Para conseguirlo, no caigas ante su astuta mirada y mantente firme.