¿CÓMO ELEGIR UNA CAMA PARA PUG?

El bienestar de tu Pug también depende de los accesorios que tenga a su disposición. Entre ellos, la cama ocupa un lugar muy especial, porque es allí donde tu perrito pasará la mayor parte del tiempo durmiendo. Por tanto, debes elegir con mucho mimo la cama para tu Pug.

¿Cuáles son las medidas ideales de una cama para Pug?

La cama de tu Pug debe adaptarse perfectamente a su tamaño. No sirve de nada (e incluso puede ser contraproducente) comprar una canasta que sea demasiado grande, porque no se sentirá cómodo en ella. Si a tu perro le gustan las cestas con bordes elevados, elige una canasta donde pueda acurrucarse y hacerse una bolita perfectamente. A veces, a algunos perritos no les gusta este tipo de canasta. En ese caso, opta por un cojín sin bordes, una alfombra o incluso un pequeño sofá para perros.

También ten en cuenta que la cama de un perro debe ir cambiando a medida que el animal crece. Un cachorro no necesitará la misma canasta que un perro mayor. ¡Esto sirve para todas las razas de perros! 

¿De qué material debe ser la cama para un Pug?

La elección del material dependerá de varios criterios. Primero de todo, hay que tener en cuenta el carácter de tu Pug. Si tiende a destrozar objetos, es mejor optar por una canasta de plástico, que es mucho más resistente y que además tiene la ventaja de ser fácil de limpiar. Hazla más cómoda colocando algunas mantas en su interior. También puedes encontrar cestas de cuero o tela para perros, que son menos resistentes, pero generalmente más cómodas. Por último, existen las cestas de mimbre, pero no son nada recomendables, ya que el perro, al morderlas, podría tragarse pequeños trozos de mimbre y asfixiarse o sufrir una obstrucción intestinal que requiera una intervención veterinaria urgente.

¡PRUÉBANOS!

30 días de pienso a

-50%

Entregado en tu casa. Sin compromiso

¿Dónde colocar la cama de mi Pug?

Instala a tu perrito en una zona tranquila y con poco tráfico, como un rincón del salón, por ejemplo. Tu Pug debe poder descansar sin miedo a que lo molesten. Si tienes hijos, enséñales a no despertarlo todo el rato. A pesar de que el Pug tiene un carácter afable y cariñoso, siempre podría enfadarse. Tu perro debe tener fácil acceso a su canasta. Cuando se haga mayor, evita colocarlo en alto. Déjale siempre un bebedero con agua fresca cerca, sobre todo en verano, para que pueda saciar su sed sin problema. Déjale también algunos juguetes disponibles a tu Pug, así como otros complementos. No es necesario dejarle comida (pienso o paté) a voluntad.

¿Estás pensando en poner a dormir a tu Pug en tu habitación? Esta cuestión sigue siendo objeto de debate en la actualidad, pues hay quienes lo desaconsejan rotundamente y quienes creen que poner a un perro a dormir con su amo no supone ningún problema. Pero en realidad, la respuesta es más compleja. Es verdad que hacer que tu perro duerma en tu habitación puede dar lugar a comportamientos problemáticos en el animal (ansiedad por separación, hiperapego). Por eso es preferible, al menos al principio, educar bien a tu Pug para que aprenda a dormir solo. Eventualmente, más tarde puedes dejarlo dormir contigo, pero al principio adiéstralo correctamente; este consejo puede aplicarse a todas las razas de perros.

¿Puede el Pug dormir afuera?

La raza de perro Pug no está hecha para dormir en una caseta en el exterior. Primero, porque es sensible al frío y al calor, debido a su hocico chato y su pelo muy corto. Su salud podría verse seriamente afectada. Estará mucho mejor dentro de casa, contigo. En segundo lugar, porque el Pug es un perro de raza pequeña. No es en absoluto un buen perro guardián, y lo que es peor aún, alguien podría robártelo. Como precaución, mantén a tu Pug dentro de casa. De todos modos, es un perro de compañía, mucho más adecuado para vivir dentro de casa con sus dueños. Y si vives en un apartamento, que es un entorno ideal para el Pug, ¡lo bueno es que no tendrás ni que cuestionarte este tema!