MUTUA Y SEGURO DEL LABRADOR

Tu Labrador Retriever puede ser bueno como un angelito, pero no obstante es muy revoltoso. Podría llegar un accidente en el momento más inesperado, y las consecuencias económicas podrían ser graves. Por eso es interesante suscribir un seguro y mutua para Labrador. Después de todo, ¡quien avisa no es traidor!

Seguro del Labrador Retriever

Seguro del Labrador Retriever: ¿es obligatorio?

En la mayoría de comunidades autónomas españolas no es obligatorio contratar un seguro para Labrador. Por norma general, la ley solo exige que contraten un seguro de responsabilidad civil los propietarios de perros potencialmente peligrosos (PPP).

¿Por qué hacerse un seguro para Labrador Retriever?

Pero aunque el seguro no sea obligatorio, es muy recomendable en determinadas situaciones:

  • Si llevas a tu perro a cazar: una póliza específica de "perro de caza" te ofrece una responsabilidad civil y cubre los daños corporales, materiales e inmateriales causados durante las partidas de caza, sean provocados por el perro o no. Este seguro suele ir acompañado de asistencia jurídica en caso de litigio.

  • Si realizas actividades al aire libre con tu perro de forma habitual: el dueño sigue siendo legalmente responsable de las acciones de su perro. El seguro especial de responsabilidad para perros te cubre en caso de daños materiales o lesiones corporales resultantes de un accidente o ataque.

Es bueno saber que en el caso de que el perro se quede en manos de un cuidador de mascotas, la responsabilidad civil del animal siempre es del propietario (aunque no estuviera en ese momento a su cargo); salvo que sea una negligencia por parte del propio cuidador (si el perro está sin correa, sin vigilancia…).

¿El mejor seguro para el Labrador Retriever?

Aparte del seguro especial para perros de caza, el seguro de responsabilidad civil privada es el mejor seguro para tu Labrador. ¡Recuerda leer la póliza detenidamente para saber el coste total y las posibles excepciones!

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Mutua para Labrador Retriever

Mutua para Labrador Retriever: ¿es obligatoria?

La mutua para Labrador no es obligatoria, pero al igual que el seguro, se recomienda encarecidamente para protegerte de los gastos de salud, que pueden subir rápidamente.

El funcionamiento de las mutuas para Labrador es simple. Cubren la totalidad o parte de los gastos veterinarios en caso de enfermedad o accidente, así como los gastos de hospitalización. Algunas mutuas también ofrecen reembolso parcial de alimentación terapéutica, precio fijo de medicamentos y acciones preventivas (vacunas, tratamientos antiparasitarios, etc.).

Las mutuas para perros a menudo ofrecen la posibilidad de suscribirse, como opción, a un seguro de responsabilidad civil así como a un seguro de muerte para ayudar a los dueños a gestionar el deceso de su perro.

¿Por qué contratar una mutua para el Labrador Retriever?

Suscribirse a una mutua es la mejor manera de proteger la salud de tu Labrador y asegurarte de que recibirá toda la atención necesaria en caso de problemas. Los gastos veterinarios pueden llegar a ser muy elevados, lo que provoca que muchos dueños no puedan cuidar adecuadamente a sus mascotas o se vean obligados a retrasar los cuidados necesarios.

Incluso si tu perrito disfruta de una salud fuerte, está predispuesto a ciertas enfermedades de las articulaciones, como la artrosis, o patologías oculares como las cataratas. Por tanto, es mejor prevenir que curar: algunas mutuas no cubren determinadas enfermedades una vez declaradas.

¿La mejor mutua para el Labrador Retriever?

El mejor seguro para tu perro es aquel que mejor se adapte a sus necesidades de salud. Algunas mutuas ofrecen contratos según las razas de perros e incluyen garantías específicas según el tamaño (un perro grande no está predispuesto a las mismas enfermedades que un perro pequeño). Su edad y estado de salud también influyen en el tipo de contrato.

Es importante tomarse el tiempo necesario para comparar ofertas y garantías. Se recomienda consultar el precio total de las franquicias así como lo que se incluye (o no) en los diferentes paquetes. La esterilización del perro, por ejemplo, a menudo se excluye.