ALIMENTACIÓN DEL LABRADOR RETRIEVER

El Labrador Retriever es una de las razas caninas más populares en todo el mundo. No es de extrañar, pues tiene una paciencia a prueba de bombas, una dulzura excepcional y una gran inteligencia. En fin, ¡es la definición del perro perfecto! Como todos los perros, tiene unos requisitos alimenticios únicos relacionados principalmente con su raza, su temperamento y su modo de vida. La alimentación del Labrador Retriever debe estar perfectamente adaptada para preservar su salud en todas las etapas de su vida.

Necesidades nutricionales del Labrador Retriever

Por mucho que sea un perro activo, el Labrador Retriever también es muy glotón, por lo que es frecuente que sufra de obesidad canina. La alimentación del Labrador Retriever debe aportarle el conjunto de nutrientes que necesita en su día a día para cubrir su gasto energético, contribuyendo al mantenimiento de su peso ideal. De ahí la importancia de entender perfectamente sus requisitos nutricionales:

  • Como la mayoría de perros grandes, el Labrador Retriever tiene unas articulaciones sensibles. Algunos nutrientes pueden contribuir a prevenir y aliviar algunos trastornos articulares, especialmente la displasia de cadera y de codo.

  • Su glotonería es legendaria, pero según algunos estudios no es la única responsable de su tendencia al sobrepeso: se cree que el Labrador Retriever también tiene una predisposición genética a ganar peso. Por tanto, la alimentación del Labrador Retriever debe ser equilibrada y saciante.

  • Como es una bola de energía, ¿tiene unos requisitos energéticos elevados? No necesariamente. Si bien la alimentación del Labrador Retriever debe ser rica y completa para proporcionarle todos los nutrientes necesarios para estar en forma, sus necesidades energéticas deben estar equilibradas para no favorecer el aumento de peso.

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¿Cuál es el mejor pienso para el Labrador Retriever?

Todos los perros comparten los mismos requisitos alimenticios básicos. Todos necesitan ingestas diarias de proteínas de origen animal, de glúcidos, de lípidos, de vitaminas, de minerales y de ácidos grasos esenciales. Lo que hay que ajustar según las necesidades reales de cada uno es la proporción de todos estos nutrientes. En el caso de la alimentación del Labrador Retriever, además hay que decantarse por un pienso que responda a sus necesidades específicas:

  • Un pienso adaptado a su metabolismo: las fibras vegetales tienen propiedades beneficiosas sobre el metabolismo de los perros con tendencia al sobrepeso.

  • Un pienso que cuide de sus articulaciones: los omegas 3 o la glucosamina pueden contribuir a reducir las inflamaciones y favorecer la regeneración de tejidos. Se puede aportar una mayor cantidad de omegas 3 a su dieta a través de aceites de pescado para perros.

  • Un pienso adaptado al tamaño de sus mandíbulas: tal como pasa con los humanos, la masticación envía una señal de saciedad al cerebro. Así que es preferible escoger unas croquetas bastante grandes para que el Labrador Retriever las triture correctamente.

¿Qué complementos alimenticios añadir a la alimentación del Labrador Retriever?

Algunos complementos alimenticios pueden favorecer la salud del Labrador Retriever y responder de una manera todavía más efectiva a sus necesidades específicas, sean puntuales o a largo plazo. Es el caso especialmente de:

  • Las vitaminas A, B2, B5, B6, PP, que pueden contribuir a la belleza de su pelaje y a la salud de su piel. Las encontramos sobre todo en el aceite de borraja.

  • La levadura de cerveza, que aporta vitaminas del grupo B que son ideales para recuperarse tras las actividades físicas intensas.

  • Prebióticos y probióticos, que son excelentes para la salud de su flora intestinal y contribuyen a una buena digestión.

¿Con qué frecuencia dar de comer a un Labrador Retriever?

¡La hora de la comida siempre es una fiesta para él! Como es muy tragón, no sabe controlarse: por eso es preferible calcular la cantidad de comida que necesita el Labrador y dividirla en dos raciones (una por la mañana y otra por la noche).