COLORES DEL HUSKY SIBERIANO

Los colores del Husky Siberiano

La Federación Cinológica Internacional (FCI) acepta muchos colores para el Husky. De hecho, se permiten absolutamente todos los colores, desde el negro hasta el blanco puro. Estos colores se pueden clasificar en diversos matices. Así que si estás buscando un perro de un color determinado, con el Husky deberías encontrarlo sin problemas. Pero ojo: la estética nunca debe ser el criterio decisivo para elegir un perro. Es preferible que te informes sobre el carácter del Husky para asegurarte de que esta raza te conviene. 

Matices de negro

La máscara es de color blanco. Encontramos:

• Negro

• Negro claro

• Negro agutí

Matices de gris

Podemos encontrar:

• Gris

• Gris claro

• Gris lobo

• Gris lobo salvaje

• Gris lobo salvaje oscuro

Matices de rojo

La trufa en general es más clara. Tenemos:

• Rojo

• Rojo claro

• Rojo oscuro

• Rojo agutí

Matices de cobre

Encontramos:

• Cobre

• Cobre claro

• Cobre oscuro

• Cobre agutí

Blanco y marcas blancas

Podemos encontrar:

• Blanco puro

• Gris y blanco

• Negro y blanco

• Otros colores con un collar blanco

El pelo del Husky

El pelo del Husky es medio-largo, denso y muy apretado. Le permite afrontar las temperaturas extremadamente frías sin ningún problema. Su capa interna también es espesa, para ofrecerle una protección suplementaria. Los cuidados del pelo del Husky son relativamente simples y requieren poco tiempo y dinero, pero aun así deben llevarse a cabo regularmente con un buen cepillo. 

Tamaño y peso del Husky

El Husky es un perro de raza grande, tanto para machos como para hembras. El macho mide entre 54 y 60 cm a la cruz, frente a los 50 a 56 cm a la cruz de la hembra. También hay una diferencia de peso notable: 20 a 30 kg para el macho y 16 a 23 kg para la hembra. Si quieres un perro más pequeño, decántate por una hembra. No existe ninguna diferencia de carácter destacable entre machos y hembras. 

El crecimiento del Husky Siberiano puede dividirse en dos fases claramente distintas. Al nacer, el Husky pesa entre 300 y 500 gramos. Empezará a crecer bastante rápido, hasta el séptimo u octavo mes, cuando la curva comenzará a ralentizarse un poco. La madurez física del Husky es más rápida que para otras razas de perros grandes. Deja de crecer entre el decimosegundo y el decimoquinto mes, en función del tamaño y el peso del ejemplar. A los seis meses, el Husky macho pesa entre 14,7 y 19,4 kg. Las hembras pesan entre 11,9 y 16,7 kg a la misma edad.

El crecimiento de un perro siempre es una etapa delicada. Habrá que evitar que haga demasiado ejercicio para que no se dañe las articulaciones. El Husky es propenso a la displasia de cadera, así que evita que suba escaleras. Las sesiones de juego tampoco deben ser muy intensas. La displasia de cadera es un problema articular serio que puede comprometer la movilidad del perro en sus fases más graves. A veces es necesario realizar una operación bastante cara.