¿CÓMO ADIESTRAR A UN HUSKY?

Presta especial atención al adiestramiento de tu Husky. Esta raza de perro no siempre es la más fácil de educar: ¡sigue todos nuestros consejos para que todo salga perfecto!

Adiestramiento del Husky: conoce la raza

El Husky Siberiano es un perro especial, que requiere un buen conocimiento de la raza antes de adoptar uno. No está indicado para todo el mundo debido a su fuerte carácter. Aunque es un perrito que adora a su dueño, a veces hace lo que quiere, especialmente cuando sus necesidades no se satisfacen adecuadamente.

Infórmate bien sobre la raza. El Husky necesita hacer mucho ejercicio todos los días. Tiene que poder correr, porque es una verdadera bola de energía. El Husky también necesita saber que obedecer le permitirá obtener una recompensa, da igual lo que sea. Es capaz de seguir una orden, siempre que a él le parezca interesante. Además, no es raro que muestre cierto espíritu de iniciativa. Finalmente, el Husky es un perro escapista. Necesita descubrir cosas nuevas. Ten en cuenta todos estos parámetros para abordar con calma el adiestramiento de tu Husky.

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Educar a un Husky: comprender las bases

El conocimiento de la raza va de la mano con una buena comprensión de la educación canina. Conocida durante mucho tiempo con el término adiestramiento, la educación de un perro se basa hoy en día en un enfoque principalmente positivo. Se trata de recompensar los buenos comportamientos, no de castigar los malos. Evita cualquier forma de violencia para no traumatizar a tu perrito. El castigo debe ser excepcional y nunca físico. Nunca pegues a tu amigo de cuatro patas y nunca levantes la voz. No lo entendería, y además te arriesgarías a que te coja miedo, lo que perjudicaría para siempre tu relación con él.

Empieza la educación de tu Husky tan pronto como llegue a casa, a la edad de dos meses. Establece las reglas del hogar para que el perro sepa lo que puede hacer y lo que no. Si planeas prohibirle que se suba al sofá o que entre a ciertas habitaciones de adulto, prohíbeselo desde cachorro, porque después será más difícil eliminar los malos hábitos. No descuides la socialización del animal, que debe tener lugar entre el segundo y el tercer mes de edad. Haz que viva el máximo de experiencias positivas y que conozca a muchas personas, perros o animales.

La educación de un perro se basa en tres principios fundamentales, que hay que tener en cuenta en todo momento: paciencia, constancia y coherencia. La paciencia es obviamente esencial. Un perro, por muy inteligente que sea, no puede entenderlo todo a la primera. Por tanto, el aprendizaje de una orden debe realizarse a largo plazo. No te enfades con tu Husky si no lo hace bien la primera vez y sé indulgente con él.

Asimismo, es fundamental ser constante. Solo la repetición a lo largo del tiempo permitirá que tu perro recuerde un ejercicio. Dedica quince minutos al día a adiestrar a tu Husky, después de una sesión de juegos o un paseo.

Por último, sé coherente. Elige una palabra para dar una orden y no la cambies. Podrías descolocar a tu perro y puede que después ya no te haga caso. También piensa en no cambiar las autorizaciones y prohibiciones todo el tiempo. Tu Husky necesita un marco de referencia bien definido para crecer en paz. No dudes en llamar a un adiestrador de perros si te preocupa no estar a la altura.

¿Qué órdenes básicas enseñarle a un Husky?

Algunas órdenes son imprescindibles, pues ayudan a mantener seguro a tu perro. Porque, de hecho, la educación está directamente relacionada con la esperanza de vida del Husky.

  • La llamada: la llamada es una orden indispensable para todas las razas de perros. Es gracias a esta orden que mantienes el control del animal cuando no va atado con correa. Empieza a enseñarle en un espacio cerrado y pide ayuda a otra persona. Turnaos para llamar al perro y felicítalo cuando vuelva hacia ti. No dejes suelto a tu Husky hasta que estés seguro de que responde bien a la orden de llamada.

  • Caminar con correa: al igual que la llamada, caminar con correa es esencial. Te permite pasear con tu perro sin miedo a que sufra un accidente, y más si vives en un entorno urbano. La vida en la ciudad implica la presencia de muchos peligros (coches, bicicletas, patinetes, etc.). Aprender a andar con correa no siempre es natural para un perro. Comienza con sesiones breves, en un área cerrada y segura. Tu Husky debe caminar a tu lado, sin tirar.